lunes, 31 de diciembre de 2012

La revolución de los vikingos


Este último día del año, me voy a permitir recomendar un libro a los políticos españoles para ayudarles a entender que se puede hacer en esta crisis económica, porque existen alternativas a tanto recorte y austeridad. Ya está bien de tanto fatalismo, el cambio es posible. Y si tienen dudas, lean el libro “La revolución de los vikingos”, de Elvira Méndez Pinedo, profesora de Derecho en la Universidad de Islandia. Esta española lleva 11 años residiendo en su capital y ella sola -o casi- luchó contra los abusos de la banca en ese país. El verano pasado se dedicó a tratar de desmigar las claves de la crisis con un aderezo muy personal, su vivencia en Islandia y el referente español. Su conclusión, la política de recortes y austeridad por sí sola no funciona. Y nos recuerda que lo dice todos los días, el que más sabe del tema, el premio Nobel de Economía Joseph Stiglitz. En Islandia los recortes se hicieron racionales y coordinados en el tiempo. El Gobierno de centroizquierda se planteó como prioritario preservar el Estado de bienestar nórdico. Eso creó un colchón para sus ciudadanos. Hubo una moratoria de dos años a los desahucios, más general que la aprobada en España. En 2010, cuando se iba a acabar la moratoria, hubo una gran manifestación y se amplió. El Estado declaró la quiebra de los tres bancos principales, levantó otros tres nuevos y creó depósitos bancarios para los residentes con el montante que tuvieran antes de la quiebra. Los acreedores o los inversores sufrieron las pérdidas bancarias, pero estas no se trasladaron al resto de la población. Se impuso un control de capitales, que aún existe. No se podía sacar dinero del país que no estuviera ligado a la economía real. En Islandia ahora no hay terreno para los especuladores. El control de los capitales fue total, si no se hubiera creado una fuga de capitales dice Méndez Pinedo en su libro. Además con el control de capitales, el dinero empezó a circular, circular y circular como si fuera una partida de la oca, lo que benefició a su economía. Lo que se ha hecho en Islandia -dice- se puede hacer en España, pero a escala europea. En Islandia sin los planes de austeridad de España se recuperó la economía. Los recortes fueron escalonados, se procuró un ajuste fiscal y presupuestario que no provocara pobreza y exclusión social, aunque también se produjo. Pero se intentó evitar en la medida de lo posible por el Gobierno. La clave fue el no rescate indiscriminado de los bancos, que libró a Islandia del destino de Grecia, Irlanda o España. Y también de la deuda externa. La interna la asumió el Estado, porque Islandia no tenía un gran déficit. España, como hizo Islandia, tiene que determinar qué deuda es moral y debe ayudar a pagar la sociedad y cuál no. También el criterio de territorialidad ha sido importante para salir de la crisis, Islandia primero es lo que está levantando el país, pero eso va en contra del mercado interior europeo, que tanto beneficia a los alemanes. Queda claro en el libro que la factura pasada por la crisis a los países europeos, pertenecientes o no a la UE, será inolvidable. Nada después de ella será igual. Los europeos nos moriremos diciéndoles a nuestros nietos que no confíen jamás en los bancos. Pero nada se tendrá en pie en esta Europa de nuestras culpas, sino somos capaces de crear entre todos una nueva moral, otra justicia y un nuevo estilo de vida. Alternativa que ya funciona en Islandia apoyada por el pueblo. Pueblo que tiene un gobierno eficaz, ajustado a la realidad económica y, por supuesto, al sentido común. Me pregunto, si será por eso, por lo que esta información no aparece, como sería normal, en los medios de comunicación de nuestro país.
Ángel Luis Jiménez Rodriguez

domingo, 30 de diciembre de 2012

La herencia recibida.


En estos días de tantas nieblas se echa mucho de menos un faro que ilumine el camino a seguir. Pero seguro que este no será Rajoy, ni tampoco su poco capacitado gabinete. En su comparecencia de ayer, Mariano Rajoy haciendo balance de su primero año de gobierno no dió ninguna esperanza, más bien se la reclamó a los españoles para él. Su discurso fue de realidades espantosas y ninguna promesa. Afirmó no tener “ninguna intención” de suavizar los objetivos del déficit, porque es ahí donde piensa seguir concentrado todos sus esfuerzos. No aclaró la cuestión capitalísima de cómo vamos a pagar la gigantesca deuda española y sus intereses, sin hundir al país en la ruina. Tal vez, porque la deuda es impagable, porque no lo sabe o porque oculta esa imposibilidad. Tampoco incluyó en su balance del año y previsiones de futuro las medidas que propone para acabar con el desempleo. Como siempre abstracciones y buenas palabras, pero ninguna salida creíble y congruente. También dió a entender que los españoles sienten escepticismo, desesperación y decepción por las medidas tomadas para evitar “la quiebra de España”. Y se justificó, como siempre, en la herencia recibida. No se da cuenta que cuanto más tiempo pasa, menos creíble resulta apelar a esa herencia. Este país necesita un líder político que transmita esperanza, porque mientras hay vida hay esperanza, dice el refrán. Pero eso con Rajoy no es posible por su pereza política y mental. La mostró ayer con su tono vital y su mirada baja, depresiva, que transmitía poca credibilidad y confianza. Lo primero que tenía que haber dicho es que sabía que no iba a cumplir su programa electoral cuando se presentó a las elecciones. Así hubiera asumido su responsabilidad. Pero el presidente Rajoy parece decidido a perseverar en su pereza y su aislamiento. Y no asume responsabilidades. Lleva treinta años haciéndolo y no le ha ido mal. El problema es si este país puede aguantar tanto.
Ángel Luis Jiménez Rodriguez

sábado, 29 de diciembre de 2012

La batalla de las cuotas.


Una sociedad desarrollada y libre no puede funcionar si no permite idénticas oportunidades a la mitad de su población. Viviana Reading, la comisaria europea de Justicia, debe estar de nuevo que trina por la oposición del PP a su plan de incorporar un mayor número de mujeres a los consejos de administración de las empresas. Ahora, el desequilibrio es abismal en las cúpulas empresariales. En España, solo hay un 11% de mujeres. Viviane Reading, que también ocupa la cartera de Derechos fundamentales, se ha propuesto reducir esa brecha. Pero, está fracasando a pesar de las intensas campañas y reuniones con el sector privado. Cada día se alzan voces más poderosas contra esta propuesta de igualdad. La última fue la de Ángela Merkel. Y el miércoles le tocó al Gobierno de Mariano Rajoy. Ese día, el PP se quedó de nuevo solo en el Congreso y rechazó, sin aportar argumentos claros, la directiva impulsada por la comisaria europea. Directiva que propone incorporar hasta un 40 por ciento de mujeres a los consejos de administración de las grandes empresas de forma progresiva hasta el año 2020. El Gobierno, que hasta ahora no se había posicionado sobre este tema, ya lo ha hecho. Ha enviado al Parlamento un informe contrario a la directiva europea de igualdad. Con este gobierno, España ha dejado de ser la vanguardia europea en políticas de igualdad. Además, está poniendo freno a todas ellas y a las que presenta la Comisión, que en este caso había sido aprobada por unanimidad de los consejeros. Así que de momento no se pueden echar las campanas al vuelo, pero tampoco caer en la melancolía. Las resistencias han sido similares en otras muchas directivas europeas aprobadas anteriormente, entre ellas las que tenían que ver con intereses económicos, sistema productivo, costumbres… Pero, la Comisión Europea sabe lo difícil que es incorporar mujeres a esta institución, como no sea a través de estrictas oposiciones. Cada cinco años, Bruselas implora a los gobiernos que presenten candidatas y aún no ha logrado componer un colegio de comisarios con más de un tercio de mujeres, cuando debería ser igualitario. Así que no se debe seguir esperando mejores tiempos, esa no puede ser una opción, hay que volver de nuevo a las barricadas y continuar sin desaliento la batalla por la igualdad. Hay muchas organizaciones en este continente y en este país peleando por el mismo objetivo. Y esta batalla es muy importante, aunque no se hayan ganado otras, porque amenaza directamente a la cúpula del poder tanto político como económico. Y en esas cúpulas, ni un solo varón está dispuesto a ofrecer graciosamente su asiento a las damas. Entonces, las mujeres tendrán que arrancárselos o arrebatárselos. 
  Ángel Luis Jiménez Rodriguez

viernes, 28 de diciembre de 2012

Los pilares del Estado de Bienestar. La Educación.


A lo largo de estos más de treinta años de democracia en nuestro país, todos los ministros de Educación han tenido una obsesión, reformar lo hecho por el ministro del Gobierno anterior. Y esta situación no puede continuar. Hay que decir basta y pedir que todos los partidos del arco parlamentario se planteen un consenso en la educación. No se puede seguir sometiendo a nuestros niños y jóvenes a un cambio continuo. Para ello es necesario que la nueva reforma tenga visos de normalidad y estabilidad. Sin embargo, la aprobación de la ley Wert de Educación, solo con la mayoría del PP en las Cortes, será un nuevo fracaso. Durará lo que el PP dure en el Gobierno. Está concebida y materializada -por sus planteamientos religiosos e ideológicos- para ser derogada inmediatamente por el partido que gane las próximas elecciones. Esto es lo que ha ocurrido antes con la LOE, la LODE, la LOGSE, la LOCE, y todas las que se han ido sucediendo al compás de la alternancia política. Es la desgracia que persigue a la enseñanza en España. Aquí se ha despreciado el consenso y se ha favorecido la imposición. Ahora, hace falta que expertos y políticos se junten y vallan de la mano para solucionar las carencias objetivas de nuestro sistema educativo. Sobre una base de lo más sencilla: enseñanza laica, igual para todos, con el trabajo como eje de su actividad metodológica e inspirada en los ideales de solidaridad humana. Este puede ser el camino para solucionar el fracaso escolar, el abandono, el deterioro de la calidad de la enseñanza, la pérdida del papel del profesorado y la amarga evidencia de que el alumnado llega a la universidad sin saber expresarse, ni oralmente ni por escrito. Hace falta una reforma no para ahora, sino para varias generaciones de españoles. No hay otra salida. Además, la educación debe ser el motor que nos ayude a salir de esta tremenda crisis y volver de nuevo a la estabilidad, el crecimiento y el empleo.

Ángel Luis Jiménez Rodriguez

jueves, 27 de diciembre de 2012

Los pilares del Estado de Bienestar. La Sanidad.


Ya se ha visto que el PP no cree en lo público. Cada vez lo tengo más claro. No pretende privatizar la sanidad para ahorrar, sino por ideología. Por eso han puesto en Madrid como Consejero de Sanidad al secretario de la Fundación ultraliberal de Aznar. Además no entienden la sanidad como un derecho, sino solo como una posibilidad de negocio. Para ellos, defensores a ultranza del liberalismo económico, solo la economía privada es generadora de riqueza. Por supuesto, del concepto de lucro, que resulta más desagradable, ni hablan. El proyecto de privatización de la gestión de los hospitales y centros de salud de la Comunidad de Madrid no tiene sentido. Aunque si les sale bien, seguramente pretenderán extenderlo a otras Comunidades Autónomas. Pero no lo conseguirán, porque no se han sentado a negociar con los encargados de ejecutarla, no han sabido explicar su necesidad, ni siquiera su conveniencia o su coste en calidad y servicio. Estos señores lo quieren imponer a las bravas. Ya lo estamos viendo en Madrid. Y eso además de no poder ser, es imposible… La sanidad en este país es intocable. Por eso, el proyecto sanitario del PP  ha incendiado la sanidad madrileña, no con protestas aisladas y puntuales, sino con una huelga generalizada que lleva tres semanas y que ha obligado a cancelar consultas y suspender muchas intervenciones quirúrgicas. Los equipos directivos de más de cien centros de salud han presentado su dimisión, y han sido respaldados por el Colegio de Médicos. Pero si oímos a los ciudadanos, a través de las encuestas, es peor todavía. Para ellos hay una línea roja, que no van a permitir que se traspase: la que delimita a la Sanidad Pública, tal y como ha venido funcionando hasta ahora. Según las encuestas, dos de cada tres españoles prefieren dejar quebrar los bancos y cajas, que se hayan hecho merecedores de ese final, antes que dañar nuestro sistema público actual de salud. Para los españoles, este constituye un intenso motivo de orgullo nacional, la autentica joya de nuestra corona institucional. Un 92% de toda la población española evalúa de forma claramente positiva la preparación y competencia de los médicos y del personal de enfermería de los centros públicos. ¡Y esto lo dice incluso la mayoría (el 55%) de quienes solo utilizan la sanidad privada! Ni unos ni otros creen que con una gestión privada vaya a mejorarse el sistema sanitario, las listas de espera, los medios técnicos, el material, la atención medica, los tratamientos… El mensaje de los ciudadanos, médicos, enfermeros o pacientes, parece muy claro: dejen la sanidad pública así, no experimenten con ella, no la toquen. Porque al precio que sea no los vamos a dejar… Con la salud no se juega.
Ángel Luis Jiménez Rodriguez

lunes, 24 de diciembre de 2012

La Navidad, el hombre y los libros.


Estos días son de turrón, zambombas y villancicos, pero tampoco puede faltar un libro. En su época, Platón identificaba la letra impresa con el olvido. Aunque él será quien traicionando a su maestro Sócrates fije las palabras en la escritura de los helenos. A partir de ese momento, el hombre y las letras se multiplicaron misteriosamente hasta nuestros días. Borges se mostraba orgulloso, no de los libros que había escrito, sino de aquéllos que había leído o se hizo leer a lo largo de sus días, porque siempre supo que un hombre es muchos hombres. Por eso, en la creación literaria hay una doble autoría: la del que lee y la del que escribe. Y diversas cuestiones, la prolongación del hombre a través de los libros, la posibilidad de la memoria gracias a la letra impresa y la construcción del mundo como imagen especular -como un espejo- de la escritura. Pues, no existe una única lectura de Hamlet o el Quijote. Según la época y el hombre, esas dos obras han servido para especular sobre el poder, la gloria, el incesto, la locura y la naturaleza umbría de las pasiones. Y hasta por la lectura y la escritura se ha cimentado una y varias ideas cambiantes del cosmos. En cualquier caso, un cosmos emanado del mismo hecho de enunciarlo en un libro sagrado como el Génesis. Hay respuesta en los libros para todo. En estas fiestas, por favor, no te olvides de los libro. ¡Feliz Navidad!.

sábado, 22 de diciembre de 2012

El ritmo perdido.


El libro “El ritmo perdido” de Santiago Auserón, ex Radio Futura, es una investigación bibliográfica sobre las melodías que viajan, aunque en las primeras páginas constituyen una deliciosa inmersión en los recuerdos de infancia y juventud de Auserón. A lo largo del libro, recurriendo a la musicología, la filología, la historia y la arquitectura, Auserón intenta determinar la pervivencia de la música árabe tras la expulsión de los moriscos o la entrada de la polirritmia en el universo hispano. “Las leyendas de los cantes de ida y vuelta son anteriores a lo que se piensa. Abundaban los negros, esclavos y libertos, en la España del sigloXVI; ellos mismos o su sus ocurrencias musicales viajarían a América antes incluso de que comenzara el tráfico de seres humanos desde África”. Para Auserón, resulta evidente que “todo el folclore peninsular ha estado bajo el signo de la negritud, sin menospreciar las influencias musulmanas y judías. Esa riqueza explica la enorme capacidad de irradiación de la música popular española sobre otros países europeos y, desde luego, sobre América. Se trata de una realidad oculta desde que se impuso un cristianismo intolerante. “La obsesión por la pureza de sangre crea en España una sociedad demencial, un delirio de mala conciencia, corrupción administrativa y negación de lo evidente”. Auserón hace desfilar en el libro un reparto estelar de testigos, Lope de Rueda, Quevedo, Lope de Vega, Cervantes, Góngora, Lorca. “Todos mencionan a los negros y, a veces, sus danzas y sus cantos. Hay algo más que curiosidades de eruditos. Ignorar la trama interétnica de España supone legitimar el modelo político impuesto a partir de los Austrias, que pretenden borrar la diversidad en aras de una homogenización. Felizmente, el Estado no ha sido tan absolutista como el mismo se soñaba. Si se estudia la Gran Redada de 1749, que pretendía reeducar a todo el pueblo gitano, se ve que ni siquiera se consiguió su apresamiento general. Muchos gitanos huyeron o fueron protegidos por las autoridades locales. Si hubiera triunfado la gran redada y sus propósitos, hoy no tendríamos flamenco”. También hay lecciones para el momento actual. En la presentación de su libro, Auserón dijo “Consciente o inconscientemente, este Gobierno se mueve por un odio a la cultura, que siempre desvela verdades incomodas. Con ser grave, la subida que han hecho del IVA, no es lo principal. Si lo es su negativa a responsabilizarse de la pobreza, la ignorancia y la violencia que traen sus decisiones. Han secuestrado la soberanía popular y desprecian todo lo que sea fluido, plebeyo o mestizo”.

viernes, 21 de diciembre de 2012

Una sociedad enferma.


Pasado unos días puedo reflexionar con mayor perspectiva sobre la horrenda matanza en la escuela de Sandy Hook, en Newton, Connecticut. Último episodio de una cadena sin fin que es necesario prevenir. En Estados Unidos, las armas de fuego producen 30.000 muertos anuales, de las cuales 14.000 son suicidios. No cabe duda, la menor duda, para cualquier ciudadano sensato que son necesarias acciones significativas y además inmediatas para prevenir nuevas tragedias derivadas de la posesión masiva de armas. Son más de 300 millones de armas en manos privadas, fruto del miedo a los otros fomentado en la sociedad, la desconfianza con la seguridad del Estado y el culto a las armas de la derecha americana. Espero que los estadounidenses hayan entendido ya, que el derecho a poseer armas de fuego no proviene de Dios ni está inscrito en la naturaleza humana. Vivimos en una sociedad enferma con crímenes como los de Newton o los de Oslo hace un año. El asesino de Newton es culpable de un delito terrible. Pero también la sociedad occidental viene fabricando, últimamente, demasiados casos de muchachos excluidos, habitualmente maltratados digital o físicamente, que al final revientan o se rinden. Véanse los casos de adolescentes americanos o europeos víctimas de acoso de sus compañeros, que para acabar con su sufrimiento social decidieron suicidarse. Según la Organización Mundial de la Salud, la tasa global de suicidios aumenta cada año hasta un 60% en los últimos 45 años. Estos crímenes deberían ayudarnos a cuestionar la sociedad enferma en la que vivimos. Y plantearnos que debemos hacer algo más de lo que hacemos para cambiarla.

Ángel Luis Jiménez Rodriguez

jueves, 20 de diciembre de 2012

Un buen periodista no tiene precio, pero…


El pasado fin de semana se otorgaron los premios del 13º Concurso periodístico de la APBA. El primer premio fue para la periodista Mª Ángeles Benito por un reportaje publicado en el diario “Campo de Gibraltar Información” donde analizaba la necesidad de la mejora de las conexiones de la comarca con el resto de España y Europa. Hubo también premios para otros buenos profesionales de la prensa y radios de la Comarca.  De esos buenos periodistas del Campo de Gibraltar, Andalucía y España quiero hablar, porque no solo están perdiendo sus empleos, sino  también un oficio. Muchos de esos profesionales que se han quedado sin trabajo llevaban décadas de servicios a sus espaldas. Al perder su trabajo, nosotros, los usuarios de la información, también hemos perdidos muchas cosas, entre ellas la palabra, que está herida de muerte. El presidente Griñan, en la entrega de los premios Andalucía de Periodismo, mostró su gran preocupación por la situación, difícil situación, en la que se encuentran los profesionales de la información. La pérdida de empleos, no ya de cientos sino de miles en los últimos años, le hizo decir que “prescindir de un periodista es como perder un disco duro, por la cantidad de información que en él se almacena”. Esta comparación tecnológica posiblemente sea dura y fría, pero la realidad es así. Muchos de esos profesionales de la información, que ahora se encuentran sin trabajo y que tienen escasas posibilidades de encontrar otro a corto plazo, son poseedores de un capital irreemplazable de conocimientos, de fuentes y de capacidad de interpretación. En esta y en otras profesiones, los EREs ha dejado  las redacciones de los medios de comunicación sin memoria y buenos profesionales. Sin embargo, el problema no se reduce a los que estaban y ya no están, sino que los que se quedan, lo hacen sin el apoyo profesional de los que se han ido y con el miedo a ser ellos los próximos que se vayan. Esos miedos pueden llevar a una actitud de bloqueo, que atenace su libertad, y con ella la de todos nosotros.  Así que, debemos preguntarnos qué queremos hacer con estos profesionales de la información y la comunicación, porque son parte esencial de nuestra democracia, sus derechos y libertades.

Ángel Luis Jiménez Rodriguez

martes, 18 de diciembre de 2012

¿Quién le ha dado bula a estos miserables…?


Los españoles creían que Gobernar era repartir felicidad, porque el señor Rajoy nos lo había prometido en las pasadas elecciones generales. “Les daré felicidad a todos los españoles”, dijo. Pero estábamos equivocados, “gobernar es repartir (a veces) dolor” ha dicho ahora el ministro de Justicia, Ruiz Gallardón. Sin embargo, no es sólo a veces sino siempre y con todo tipo de dolores, el dolor de la libertad controlada, el dolor de la educación regresiva a oscuros tiempos, el dolor de la justicia nunca alcanzada y disminuida, el dolor de la ruindad de abusar de la salud de la gente, el dolor causado a personas enfermas dependientes abandonándolas, el dolor de las ridículas pensiones regateadas e ilegalmente valoradas, el dolor de la cultura capada, el dolor de lo laboral humillado, el dolor de la angustia, de la penuria, del temor ante el futuro, el dolor del hambre, de los comedores sociales, el dolor de los desahucios, el dolor de los ahorros preferentes estafados,  el dolor de la violación continua de la Constitución,  el dolor de la corrupción consentida, el dolor de saber que nos mienten siempre,  el dolor de conseguir que los despreciemos, el dolor de su falta de escrúpulos, de las coartadas estúpidas, el dolor de la mano dura, de no consensuar nada, de imponer su autoritarismo, de que sean tan cobardes y tan injustos. La sociedad española está anegada de dolor. El dolor se ha convertido en la nueva unidad de medida de España. Y este dolor como siempre está mal repartido, no es igual para todos. Si gobernar es repartir dolor, ¿por qué ese dolor siempre recae sobre los menos pudientes? ¿Cuándo lo van a repartir entre los ricos, tocándoles el bolsillo que es donde más les duele? Estas navidades, el Gobierno no nos va a desear las felicidades de siempre, sino más dolor. Pero, ¿quién le ha dado bula a estos miserables para repartir tanto dolor?

Ángel Luis Jiménez Rodriguez

sábado, 15 de diciembre de 2012

¿Convencer o imponer?


Convencer o hacer proselitismo ha sido un distintivo de todas las religiones. Pero, ahora a las Iglesias ya no les preocupa convencer ni hacer prosélitos, sino imponer. Y los obispos españoles han conseguido imponer la asignatura de religión en el proyecto de ley de enseñanza que ha presentado esta semana el Gobierno. Porque los alumnos que elijan no cursar la asignatura de Religión tendrán que estudiar una materia alternativa más fuerte. Esta era una de sus reivindicaciones históricas -endurecer la alternativa a la clase de Religión para evitar un efecto disuasorio-, que provocó litigios en los noventa y una retahíla de comunicados de la Conferencia Episcopal.  Además, en la nueva ley también se va a cumplir otro de sus deseos, la supresión total de la asignatura Educación para la Ciudadanía, que fue puesta en marcha por el anterior Gobierno socialista y respaldada por el Tribunal Supremo tras años de polémica y mucho ruido de la Iglesia. Así que ahora los periódicos del régimen proclaman “La enseñanza es religiosa otra vez”. No podemos olvidar que los obispos ganaron durante la Transición la batalla de las clases de Religión en todas las aulas, tanto en centros concertados católicos como en los públicos. Pero eso sí, la asignatura dejó de ser obligatoria. Ahora se plantean que lo sea de nuevo. Así que nos podemos encontrar una vez aprobada la reforma educativa del ministro Wert, que lo que antes era una asignatura voluntaria termine siendo una asignatura obligatoria, algo que siempre ha querido la Iglesia. No sé si con estas victorias de los obispos españoles, a continuación se atreverán a exigir que se modifique la Constitución para convertirnos en un Estado confesional, porque lo de aconfesional… tampoco les gusta.
Ángel Luis Jiménez Rodriguez 

miércoles, 12 de diciembre de 2012

Quién bien te quiere te hará llorar…


Europa nos hace llorar, pero a diferencia del refrán, porque no nos quiere bien. Este es un problema. De esto hablaba el lunes el ministro de Economía, Luis de Guindos, en el programa “El día menos pensado” de Radio Nacional de España. El ministro dijo que la sombra del rescate o la ayuda europea a la economía española ha vuelto. Y que el Gobierno “está mirando” la posibilidad de solicitar ya el rescate a Europa. Según explicó, la inestabilidad en Italia reavive el oleaje contra el euro y eso puede provocar una nueva subida de la prima de riesgo española. Aseguró que, “los tiempos son importantes, hay que elegir la mejor decisión en el mejor momento posible”. Y ese momento puede ser el jueves en el Consejo de Europa. Pero también tenía dudas porque aún no se había culminado totalmente la ayuda a los bancos solicitada en junio pasado. No sé qué les pasa a los políticos de este Gobierno que cada día están más desnortados y con más dudas sobre lo que hay que hacer. En el exterior está muy claro, casi tanto como en España, y así lo reflejan los medios de comunicación. Pero tenemos un presidente de Gobierno que no toma decisiones.  No se sabe si sube o si baja. Ni tampoco  si el rescate es una opción o una necesidad. Por supuesto, esta situación está implicando  graves problemas para el país, debido al poco carisma de Mariano Rajoy, a su falta de liderazgo como presidente del Gobierno, a su gris personalidad y a ser un mentiroso hasta decir basta… Elegimos mal y ahora estamos pagando las consecuencias.

Angel Luis Jiménez  Rodriguez

martes, 11 de diciembre de 2012

Es que no se enteran…


En este momento, en el que estoy escribiendo, 16 millones de contenedores a bordo de 5.000 barcos portacontenedores navegan de un lado a otro del planeta. En 2011 se transportaron 1.385 millones de tonelada de mercancías en el interior de estas grandes arcas, que no son como las de Noé. Así viaja todo ahora. Y eso se hace a través de dos grandes autopistas existentes en el mar entre oriente y occidente. Desde Asía a EEUU y Europa, estas dos autopistas son las dos arterias por donde circula la sangre que mueve la economía mundial. Y pasan por nuestra Bahía. Sin embargo, este tipo de informaciones sobre la Bahía de Algeciras pasan desapercibidas la mayoría de las veces para los algecireños. Como ejemplo la noticia del pasado 27 noviembre, cuando la terminal semiautomatizada (TTI) de Algeciras celebró el millón de TEU manipulados en 2012. El TEU, llamado así por sus siglas en inglés, es el contenedor para fletes marítimos con unas medidas estándar de seis metros de largo por 2,3 metros de ancho y alto. A finales de este año la dársena del Estrecho superará los 4 millones de TEUS manipulados en un año. Sin embargo, seguimos sin que el Gobierno garantice para este año y el próximo en los Presupuestos Generales del Estado una aportación digna -será solo de 13 millones de euros- del gran proyecto europeo de Corredor Central, que arrancará en el tramo Algeciras-Bobadilla para seguir hacia Madrid y desde allí hacia el resto de Europa. Proyecto prioritario para el Campo de Gibraltar, Andalucía, España y Europa ya aprobado, desde el 19 de octubre del 2011, en la Red Básica Transeuropea de Transportes (TEN-T). Pero una vez más hay que hablar de la torpeza y poca visión de futuro de este Gobierno con la Bahía de Algeciras, que alberga el primer puerto de la península ibérica en tráfico de mercancías y pasajeros. Ignora o no se quiere enterar que en la Bahía de Algeciras se ubica el primer cluster industrial del sur de Europa por volumen de facturación. Las grandes industrias de la Bahía produjeron mercancías en el ejercicio de 2010 por un valor aproximado de 10.000 millones de euros, dando ocupación de forma directa, indirecta o inducida a 23.000 personas. El 40% de esa producción se exporta al exterior sin tener las conexiones adecuadas en el tramo Algeciras-Bobadilla con el Corredor Central, o eje ferroviario nº 16, que unirá las capitales de los tres Estados miembros por los que discurre este eje: Portugal, España y Francia. Y aquí estamos todos lamentándonos, y sin hacer nada para salir de esta absurda situación. Qué Gobierno de incompetentes, solo sirven para hacer los recados que les manda la banca.
Ángel Luis Jiménez Rodriguez

jueves, 6 de diciembre de 2012

Todo vale…

“No es país para viejos” es el título de una película de los hermanos Coen que interpretaba Javier Barden. Por supuesto, la película transcurre en EEUU y no en España. Sin embargo, nuestro país si es para viejos, gracias al sistema público sanitario español, uno de los mejores del mundo. La vida para todos los ciudadanos españoles -viejos y jóvenes, niños y ancianos- es mucho más fácil sabiendo que, si nos caemos en la calle, tenemos una enfermedad leve o grave y un accidente de cualquier tipo, hay unos servicios sanitarios -ambulatorios, urgencias y hospitales- que se ocuparan de nosotros. Ahora estos derechos reconocidos en nuestra Constitución están en peligro con los recortes y privatizaciones que pretende hacer en la sanidad pública el Gobierno de Rajoy. En estos días, los profesionales de la sanidad preocupados e indignados por ese futuro incierto de la sanidad se han manifestado por las calles de Madrid. Incluso han bailado con coreografía la canción “Think” de Aretha Franklin, que es un canto a la libertad. Me figuro que habrán podido leer las barbaridades, que por este tipo de manifestación, ha hecho la derecha cavernaria de los profesionales de la bata blanca. Ni el Gobierno ni sus acólitos han sabido ver -no ven, ni escuchan, ni explican- la forma visual y pacifica que han adoptado los profesionales de la sanidad para hacer eficaz su protesta. Además, no saben que lo único que no nos pueden quitar estos malvados es la alegría y la dignidad. Posiblemente su cabreo estaba motivado por la eficacia y contundencia de las movilizaciones. Eso es lo que les ha molestado realmente, y no el que como dicen haya sido poco seria. La paradoja es que a este Gobierno la seriedad le importa poco, porque se burla de cosas tan serias como el trabajo, la educación y la sanidad, y sin embargo se toma muy en serio otras que no lo son tantos como el dinero de los bancos y sus intereses. Y sobre todo, lo que no admiten, es que en defensa de un derecho tan importante como la calidad y la universalidad de la sanidad pública, profesionales y enfermos hayan  dicho y mostrado que todo vale.
Ángel Luis Jiménez Rodriguez

miércoles, 5 de diciembre de 2012

Los señuelos del ministro Wert.

El ministro de propaganda del régimen, José Ignacio Wert, ha insultado de nuevo la inteligencia de los españoles con el señuelo de la reforma educativa y el enfrentamiento con Cataluña por la introducción del castellano como lengua vehicular. Una reforma educativa inadecuada, inasumible e innecesaria, cuya pretensión es crear un conflicto donde no lo había. La maniobra es hacer ruido para iniciar una guerra de lenguas o identitaria y así sacar la crisis social del debate diario. Las lenguas son instrumentos de cultura y no de enfrentamiento y desunión, excepto cuando se manipulan o se utilizan ideológicamente. El credo de la derecha consiste en una sola lengua y una sola religión, en vez de diferentes modalidades lingüísticas y religiosas, propio de la diversidad de los españoles. Así que mientras encaramos los cinco millones de parados registrados y privatizan la sanidad a marchas forzadas, a los españoles nos tienen preocupados, enfrentados y sin pegar ojo por la relación entre el catalán y el español, problema ya resuelto en el artículo 3.2 de la Constitución y en sentencias de su Tribunal. Pero el ministro Wert ha conseguido que estemos entretenidos con esta polémica que ocupa, sin excepción y con mucho ruido, todos los medios de comunicación. Lo importante es hacer ruido Un falso y estéril debate con el abucheo de unos y el aplauso de otros, para que nos olvidemos de los grandes problemas de esta crisis que está llegando a proporciones insostenibles y lamentables. Palabras, palabras, palabras… y ninguna solución.
Ángel Luis Jiménez Rodriguez

martes, 4 de diciembre de 2012

Ahora nos toca armarla otra vez…

Un año antes de la entrada en vigor de la Constitución, el 4 de diciembre de 1.977, el pueblo andaluz se manifestó ante España y el mundo como lo que siempre había sido una realidad histórica innegable, con identidad, símbolos y cultura propia. Reclamó de forma contundente y pacifica el derecho al autogobierno. Víctima de este hecho fue José Manuel García Caparro, asesinado al terminar la manifestación de Málaga. Su nombre se añadió a la larga lista de los que dieron su vida por Andalucía en el siglo XX. Aquella muerte nos cambió la historia y no se puede olvidar. Fue la simiente que nos ayudo a conseguir un sistema político y social más justo para Andalucía y España. Hoy, hay que rescatar el espíritu del 4 de diciembre, porque el modelo de Estado neo-liberal y nacional-católico, que el actual Gobierno del Partido Popular está imponiendo, ha roto los precarios equilibrios que han existido siempre entre capital y trabajo, ricos y pobres y súbditos y ciudadanos. Pero, el PP ya está perdiendo la mayoría social y además de forma acelerada. Su primera derrota fue en las urnas de Andalucía. Por eso desde Andalucía se está reivindicando un estado plurinacional federal, donde la sanidad, la educación y los derechos sociales básicos estén garantizados en pie de igualdad. Y desde donde se van a exigir siempre la igualdad, la equidad y la solidaridad entre todos los pueblos que conforman la España actual. La gente puede ser distinta y las CCAA también, pero los andaluces no vamos a permitir que unas sean más que otras. Ya lo hicimos una vez y fue determinante, ahora nos toca armarla otra vez. Así que todos a una…
Ángel Luis Jiménez Rodriguez

domingo, 2 de diciembre de 2012

“Antes éramos vanidosos…”


Esta semana el ministro de Justicia, Alberto Ruiz Gallardón, ha hecho una observación que exige una reflexión. Dijo: “Pretendemos acabar con el ancien régimen”. La derecha española y el PP consideran el ancien régime al sistema levantado durante los 20 años de Gobierno socialista. Aunque criticable en algunas cosas, también tuvo logros tan importantes como el poner en pie un sistema político y social menos injusto, promoviendo el desarrollo de un Estado de Bienestar y facilitando la prodigiosa modernización del país. Según el ministro, no pretenden reformar todo, sino traer un nuevo régimen de derecha. Una nueva dirección política, que no pretende transformar lo anterior, sino revolucionarlo como hizo en los años ochenta Margaret Thatcher y los neoliberales. Todas las medidas tomadas por el Gobierno actual en esta legislatura pretenden acabar con la superestructura política anterior a su llegada al poder. Lo dicho por el ministro, no es una ocurrencia ni una frase para la prensa, va muy en serio. Como muestra las medidas que está adoptando el Gobierno de Rajoy en sanidad, educación, justicia, en relaciones laborales y en la gestión social. Incluyendo el debilitamiento del Parlamento, una institución cada día más desairada y humillada por su mayoría absoluta. Y finalmente, esta semana le ha tocado a las pensiones, que decían eran intocables. Está muy claro lo que pretende el PP, primero reformar, después cambiar y finalmente arrasar. Dicen como en el dicho popular: “Antes éramos vanidosos, ahora nos curamos y somos perfectos”. Así es la derecha.

Ángel Luis Jiménez Rodriguez